LA ASISTENTA - FREIDA McFADDEN

 ⭐⭐⭐⭐⭐

LA ASISTENTA 

Todos los días friego la preciosa casa de los Winchester de arriba abajo. Recojo a su hija del colegio y preparo deliciosas comidas para toda la familia antes de subir a cenar sola en mi minúscula habitación del piso superior.

Intento no prestar atención a Nina cuando lo ensucia

todo simplemente para ver cómo lo limpio. A las

extrañas mentiras que cuenta sobre su propia hija. A su marido, que cada día parece más abatido. Pero cuando miro a Andrew a los ojos, castaños, encantadores y llenos de dolor, no me resulta difícil imaginar cómo sería vivir en la piel de Nina. El gran vestidor, el coche de lujo, el esposo perfecto.

Hasta que un día no me resisto a probarme uno de sus maravillosos vestidos blancos. Solo quiero saber qué se siente. Pero ella pronto lo descubre, y cuando me doy cuenta de que la puerta de mi habitación solo se cierra por fuera ya es demasiado tarde.

Algo me reconforta:

los Winchester no saben quién soy en realidad.

No saben de lo que soy capaz...

EL SECRETO DE LA ASISTENTA

Mientras sigue enseñándome su increíble ático, tengo un mal presentimiento sobre la mujer que está tras las puertas cerradas. Pero no puedo arriesgarme a perder este trabajo, no si quiero mantener a salvo mi secreto más oscuro...

Es difícil encontrar un empleador que no haga demasiadas preguntas sobre mi pasado. Así que agradezco a mi buena estrella que los Garricks milagrosamente me den un trabajo, limpiando su impresionante ático con vistas a la ciudad y preparando comidas elegantes en su reluciente cocina. Puedo trabajar aquí un tiempo, guardar silencio hasta que consiga lo que quiero. Es casi perfecto. Pero todavía no he conocido a la Sra. Garrick, ni he visto el interior de la habitación de invitados. Estoy segura de que la oigo llorar. Noto manchas de sangre alrededor del cuello de sus camisones blancos cuando estoy lavando la ropa. Y un día no puedo evitar llamar a la puerta. Cuando se abre suavemente, lo que veo dentro lo cambia todo...

Es entonces cuando hago una promesa. Después de todo, ya he hecho esto antes. Puedo proteger a la Sra. Garrick mientras mantengo mis secretos a salvo. Douglas Garrick ha obrado mal. Pagará las consecuencias. Es solo cuestión de hasta dónde estoy dispuesto a llegar...

LA BODA DE LA ASISTENTA 

Estoy comprometida con el hombre de mis sueños , y en unas pocas horas, voy a comparecer ante un juez, que nos declarará marido y mujer, hasta que la muerte nos separe . A pesar de algunos baches en el camino, este día es todo lo que soñé que sería.

Solo hay un problema: alguien por ahí no quiere que viva lo suficiente para decir mis votos.

Y si no tengo cuidado, es muy posible que consiga su deseo.

LA ASISTENTA TE VIGILA

"¡Ustedes deben ser nuestros nuevos vecinos!", dice la Sra. Lowell con entusiasmo y saluda con la mano desde el otro lado de la cerca. Agarro la mano de mi hija y le devuelvo la sonrisa; pero en cuanto la Sra. Lowell ve a mi esposo, una expresión extraña cruza su rostro. En ese momento hago una promesa. Por fin tenemos un hogar familiar. Mi pasado ha quedado muy, muy atrás. Y haré lo que sea para que siga siendo así...
Solía ​​limpiar casas ajenas; ahora, no puedo creer que esta casa sea realmente mía. La encantadora cocina, la tranquila calle sin salida, el enorme jardín donde mis hijos pueden jugar. Mi esposo y yo ahorramos durante años para darles a nuestros hijos la vida que se merecen.
Aunque desconfío de nuestra nueva vecina, la Sra. Lowell, cuando nos invita a cenar es nuestra oportunidad de hacer amigos. Su criada abre la puerta con un delantal blanco y el pelo recogido en un moño apretado. Sé exactamente lo que es estar en su lugar.
Pero su mirada fría me da escalofríos...
La criada de los Lowell no es lo único extraño en nuestra calle. Estoy segura de ver una figura sombría observándonos. Mi marido sale de casa tarde por la noche. Y cuando me encuentro con una mujer que vive enfrente, sus palabras me hielan hasta los huesos: «Cuidado con los vecinos».
¿Cometí un terrible error al mudarme aquí con mi familia?
Creí haber dejado atrás mis secretos más oscuros. Pero ¿podría ser esta tranquila calle suburbana el lugar más peligroso de todos?